lunes, 18 de febrero de 2013

Muchachos, esto mismo el jueves.

Campeonato Nacional de Liga.
24ª Jornada.

Real Valladolid 0.
Atlético de Madrid 3. (0-1. Falcao, min 10´. 0-2. Diego Costa, min. 53´. 0-3. "Cebolla" Rodríguez, min. 89´).

Victoria a domicilio tres meses después. Bombona de oxigeno para las aspiraciones ligueras. Este mismo resultado nos daría el pase el jueves en la Europa League.


Las dudas se habían instalado tras los dos últimos resultados. Era normal. La mala imagen de Vallecas y el despropósito ante el Rubín alimentaban esas dudas. No menos cierto es que en lo que llevamos de 2013 el equipo, aún sacando los resultados en el Calderón y en Copa del Rey, parece haber perdido la chispa de la primera mitad de temporada. Ayer en Pucela volvimos a ver a esa roca que Simeone ha creado. Equipo serio, sin fisuras y letal en ataque.

Fue un monólogo. El Valladolid era incapaz de meterle mano al Atleti y los nuestros, sin alardes, controlaron el partido los 90 minutos. Falcao, en el 10´ de la primera parte, marcaba el primero y a partir de entonces todo fue mas fácil. Gabi crecía en la medular, Godín y Miranda solventaban sin problemas en defensa y Diego Costa era un titán batiendose el cobre con los centrales vallisoletanos. Volvió Costa y volvimos a jugar con 11. Se le va a echar de menos en Moscú el jueves. Mucho.

La segunda parte se inició como la primera. El Atleti controlaba el juego y aprovechaba las facilidades de la zaga local. Un centro de cabeza de Koke ponía en franquicia a Diego Costa para hacer el 0-2 y matar el partido. Luego "Cebolla", en el último minuto, marcaba el tercero en un nuevo error de una calamitosa defensa del Valladolid. Por último, quiero hacer mención a los 1.500 atléticos que no pararon de apoyar al equipo en el José Zorrilla.


Ahora toca pensar que se puede remontar frente al Rubín. Es muy difícil pero no imposible. Al jugar como visitantes, el animo de dar la vuelta a la eliminatoria tiene que salir desde dentro del vestuario. Ellos, los futbolistas, son egoístas por naturaleza y por lo tanto van a salir con el convencimiento de levantar ese 0-2 por su propio orgullo. Ni por ti, ni por mí, ni por ninguno de los valientes que estuvimos el jueves en el estadio. Sólo y exclusivamente por ellos mismos.

Me niego a pensar que no se puede remontar ese resultado. Creo que planteando el partido como el de ayer, sin prisas y con la paciencia de saber que hay que marcar el 0-1 antes que el 0-2, la remontada es posible. Las prisas y la precipitación no serán buenas consejeras. Solo queda esperar al jueves. Que llegue pronto. ¡¡¡A por los rusos!!!.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.